Lo mismo podría decirse de él con las tetas de su amada. En cuanto a las camisetas de los porteros, tanto en la primera como en la segunda equipación se observa por primera vez un juego de rayas horizontales que las hacen completamente diferentes. Extendieron sus toallas a las puertas del chiringo, se quitaron toda la ropa y empezaron a darse crepita el uno al otro.